Cada cuanto voy a la peluqueria

Dependiendo de la raza, el tipo de pelo, si necesita cortar el pelo o no, si realizamos mantenimiento en casa, existen infinidad de factores que debemos tener en cuenta a la hora de saber cada cuanto tiempo deberemos visitar la peluquería canina.

Los baños los deberemos realizar con un intervalo entre uno y dos meses, siempre y cuando usemos cosmética adecuada que no perjudique la salud del perro, a nivel de pelo y piel. Esto podrá reducirse hasta cada semana o diez días si el perro se ensucia con mucha asiduidad por salir al campo, vivir en jardín..., en función de todo esto llevaremos a bañar a nuestro perro a la peluquería como máximo cada 2 meses, siempre y cuando no lo hagamos en casa.

En cuanto al corte de pelo, debemos saber que el pelo crece más o menos un centímetro al mes por lo cual en dos o tres meses requeriría un arreglo, entre medias, dependiendo de la raza o tipo de pelo, le deberemos mantener con cepillados en casa.

Distinto será el caso de los baños terapéuticos, los cuales en función del problema en la piel o el pelo podrán variar el intervalo entre baños desde una semana hasta un mes, según prescripción veterinaria.

No debemos olvidar que los baños y cortes de pelo no solo se deben realizar por estética sino por salud del perro y de nosotros que convivimos con ellos.

Estilista Canino Hugo Pesquera

www.escuelaprocan.es

hugopesquera@escuelaprocan.es

El baño

Tanto la piel como el pelo necesitan cuidados, los baños no solo se realizan con el propósito de que el perro no huela mal, debemos pensar que estamos invirtiendo en la salud del perro.

En el mercado nos encontraremos con una gran variedad de productos de cosmética, cada uno de ellos para un tipo de pelo o piel, para conocer que cosmética será la más aconsejable para el perro nos asesorarán los profesionales del sector que estudiaran el tipo de pelo o las características de la piel para que no solo tengamos guapo y con buen olor al perro, sino que además tendremos un perro saludable.

Existen champús con acondicionador (pelos sedosos, lisos), champús para pelos duros, para dar volumen, champús neutros, exclusivamente para la piel o para el pelo, champús para tratamientos específicos veterinarios, champú en seco.

Ya una vez en la bañera lo primero será regular el agua hasta tener una temperatura templada y agradable, asegurándonos siempre antes de echarla por encima del perro, tras mojarle bien aplicaremos el jabón, evitando en las razas de pelo largo los movimientos en círculos que enredarán el pelo y después del baño tendremos más trabajo a la hora de desenredar.

En cuanto a la cabeza, los champús pese a estar preparados para no irritar las mucosas, tendremos la prudencia de enjabonar lo ultimo la cabeza y aclararla lo primero de manera que el jabón estará el menor tiempo posible cerca de los ojos.

Una vez enjabonado aclararemos el pelo asegurándonos que no que absolutamente nada de jabón, puesto que los restos de champú pueden ocasionar lesiones en la piel.

El proceso de enjabonar y aclarar lo repetiremos hasta conseguir que el pelo este completamente limpio.

Estilista Canino Hugo Pesquera

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El cepillado en los cachorros

En la peluquería el cepillado del cachorro debe ser visto como parte de su educación, para ellos lo normal es que de principio no sea algo agradable ya que le estamos forzando a hacer algo que ellos no quieren. Los cachorros de pelo largo deberán tener un mantenimiento del manto desde que llegan a nuestra casa. Al principio nos encontraremos con un pelo mucho mas fino, como borra, el cual se cepillara con gran facilidad, siendo bastante improbable la formación de nudos, el cometido en este momento sera el de acostumbrar tanto al cachorro como a nosotros mismos, a una rutina de cepillado que en un futuro el perro lo verá como algo normal y nada traumático.


¿Cómo actuamos frente a las reacciones de los cachorros en el cepillado?


Las reacciones de los cachorros al cepillado pueden ser de todo tipo, dependiendo del carácter del perro, nos encontraremos cachorros que no se dejan, que muerden el cepillo, que no paran, que dan saltos, en cualquiera de los casos una vez que empezamos el cepillado debemos terminar y no ceder ante el cachorro, ya que lo que provocaremos será afianzar su mal comportamiento, puesto que verá que actuando de esa manera dejaremos de cepillarle, una vez acabado, será el momento de premiarle con una golosina de perros para conseguir el efecto contrario, que al perro le acabe gustando.


¿Cómo cepillamos al perro?

Para mantener el pelo completamente desenredado debemos cepillar todas las capas, no nos bastará con hacerlo por arriba, hay que coger el pelo desde abajo hasta arriba levantando el pelo y llegando bien a la raiz, de esta manera nos aseguraremos que el pelo queda perfectamente peinado. También haremos especial hincapié en las zonas donde se forman nudos mas frecuentemente como detrás de las orejas, las axilas y el cuello.


¿Donde cepillamos al perro?


Algo a tener muy en cuenta es el lugar donde le cepillaremos, lo ideal es una mesa con unas medidas en las que pueda estar perfectamente el perro (sin que pueda llegar darse carreras por ella) ya que el cachorro estará más controlado y nuestra espalda nos lo agradecerá. Encima de la mesa no nos podremos dejar nunca al perro solo para evitar caídas, teniéndolo vigilado en todo momento.

 ¿Que usamos para cepillar al cachorro?

Nos encontraremos gran variedad de utensilios para el mantenimiento del manto del perro como cardas, peines, cepillos, rastrillos, deslanadores, manoplas, cada una para un tipo de pelo.

Las cardas, cepillos y peines lo usaremos en razas de pelo largo (yorky, schnauzer, westy, maltes...)

Los rastrillos y deslanadores se usaran para perros con pelo medio y muy denso para poder arrastrar el pelo muerto y ayudarle a realizar la muda.

Las manoplas se usarán en razas de pelo corto (boxer, braco, beagle, bulldog...)

Estilista Canino Hugo Pesquera

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hugopesquera@escuelaprocan.es